La iniciativa se integra dentro de un proyecto más ambicioso que tiene por objeto la digitalización de toda la Audiencia Nacional, es decir, de papel cero, lo que supondrá, en palabras del propio ministro: "mayor agilidad, eficiencia, trasparencia y seguridad jurídica" en los procedimientos, así como la puesta en marcha de un proceso en el que "el puzle de la modernización de la justicia comienza a encajar".