Los Secretarios Judiciales defienden el Pacto de Estado de la Justicia 2001 que propiciaba un sistema equilibrado de distribución de competencias entre el Ministerio de Justicia y las Comunidades que tienen competencias en esta materia, y que en palabras de Antonio Dorado, se traduce en la conveniencia de que las funciones de los Secretarios Judiciales se realicen mediante un sistema homogéneo para toda España.