"Las comunicaciones entre abogados, procuradores y tribunales se harán de forma telemática. No es una opción, nos obliga la ley. Vamos a empezar con las pruebas piloto, los cursos de formación y lo que haga falta para que el 1 de enero haya papel cero en los juzgados", explicó Catalá.
Además destacó que aunque hay órganos judiciales con sobrecarga de trabajo, no se podrán crear demasiados juzgados nuevos. "Preferimos autorizar refuerzos y crear plazas, 282 de jueces y 66 de fiscales, más 2.023 de funcionarios. Con eso y con las nuevas tecnologías haremos frente".
El secretario general de la Administración de Justicia, Antonio Dorado, secretario judicial de profesión, asumió en nombre de sus compañeros el resto de la innovación tecnológica y se comprometió ante el ministro a que el colectivo hará un esfuerzo suplementario "para la adaptación a los nuevos tiempos".