Tal y como exige la Ley de Acceso y su Reglamento (RD 775/2011), tras la realización de la carrera, el máster y el prácticum, los aspirantes deberán superar un examen tipo test, con cincuenta preguntas, al que deberán responder en hora y media, así como resolver, tras una hora de descanso, un caso práctico durante cuatro horas. Estas pruebas se realizarán entre los meses de enero y febrero todos los años.
De las preguntas del test, el 50% corresponderán a cuestiones generales, tales como la deontología profesional, el funcionamiento de la justicia gratuita o las responsabilidades derivadas del ejercicio profesional de abogado o procurador. Por su parte, el 50% restantes, serán de naturaleza técnica, es decir estarán relacionadas con la capacidad de aplicar los conocimientos jurídicos del aspirante al ejercicio de la profesión.